ENTREVISTA A LAURA CRUZ Y LUCAS GRIGOLATO- INGRESO AL IB. PARTE 2: “LA PASIÓN CON LA QUE CADA PROFESOR TRANSMITE SUS CONOCIMIENTOS ES INIGUALABLE”

En esta segunda parte de una entrevista sobre el ingreso a estudiar en el Balseiro, el Ingeniero en Telecomunicaciones Lucas Grigolato y la Ingeniera Nuclear Laura Cruz hablan, entre otros temas, acerca de las causas de elección de sus carreras, qué peso tuvo la beca completa para viajar a Bariloche y cómo es volver a casa ya recibidos.

Fecha de publicación: 08/02/2021

Laura Cruz se recibió de Ingeniera Nuclear a mediados de 2019, siendo la primera egresada de la provincia de Salta en esa carrera específica del Balseiro. Tiene 25 años y es oriunda de Salta Capital. En la actualidad, es estudiante de la Maestría en Física Médica de la misma institución. Su música favorita es del mundo Kpop, y su banda predilecta es Big Bang. Cuenta que su película favorita es “La lista de Schindler” y si se habla de series de TV, elige “Crash landing on you”. ¿Deportes? La natación.

Lucas Grigolato egresó de Ingeniería en Telecomunicaciones a fines de 2020 y tiene 30 años. Debido a la pandemia de COVID-19, defendió su proyecto integrador de modo virtual como el resto de sus compañeros. Nació en Rosario pero se autodefine “fuentesino”, ya que vivió desde los 3 años de vida en el pueblo de Fuentes, Santa Fe. Su película favorita es Mr. Nobody, y entre sus bandas o músicos favoritos están: Gustavo Cerati, Linkin Park, 3 Doors Down y Ollie Wride. Las series de TV que más le gustan son Breaking Bad, The Office, Cobra Kai, Daredevil, Sons Of Anarchy y Mr. Robot. Además, si elige un deporte es andar en bicicleta.

Elegir una carrera del Balseiro

-No podemos dejar de preguntarles por la elección de la carrera de grado. ¿Qué los inspiró a elegir la carrera que hicieron cada uno en el IB? ¿Por qué la eligió cada uno/a?

-LC: Cuando estaba estudiando ingeniería química en la UNSa, en el segundo año, en una materia vimos lo que era la energía nuclear, vi toda la física que había detrás de ella y las aplicaciones que había. Hasta ese entonces yo creía que se utilizaba solamente para generar electricidad y hacer armas nucleares. Pero me di cuenta que no sólo se trataba de eso, había múltiples aplicaciones, y las que más me llamaron la atención fueron las aplicaciones médicas. Luego de mucha investigación web sobre la misma, me sentía muy atraída hacia esa carrera, y luego de pensarlo bastante decidí estudiar ingeniería nuclear.

-LG: Antes de entrar al IB yo estudiaba Ingeniería Electrónica y tenía pensado hacer la orientación de telecomunicaciones o de electrónica digital. Cuando me enteré de la existencia de la carrera de teleco en el IB miré el plan de estudio y vi que reunía la mayor cantidad de materias que me gustaban de electrónica y omitía algunas áreas que no me gustaban tanto. Una vez dentro me di cuenta que teleco era la carrera para mí y que me gustaba más que mi carrera anterior.

-Laura, por ser mujer, ¿sentiste algún tipo de discriminación durante la carrera? Hay pocas mujeres en Ingeniería Nuclear.

-LC: La verdad que nunca sentí eso, ni por parte de mis compañeros ni los profesores. Nunca fui tratada diferente por el hecho de ser mujer. Es verdad que la mayoría de los estudiantes son hombres, pero creo que la cantidad de mujeres que ingresan por año en ingeniería nuclear va en aumento.

-¿Qué les dirías a las chicas que tienen ganas de estudiar física pero no se animan porque piensan que no es para ellas?

-LC: Las carreras de ciencia necesitan de más mujeres con dedicación, pasión y, sobre todo, con curiosidad sobre lo desconocido. Ya no existen barreras para nosotras, este es nuestro momento de demostrar de lo que somos capaces y derribar todo tipo de estereotipo. ¡Anímense chicas!.

-¿Cómo fue la experiencia de la cursada y de vivir en el campus?

-LC: Fue muy linda y agotadora a la vez. Me costó bastante acostumbrarme al ritmo de estudio del IB, el cual era muy distinto al de mi universidad anterior. Sin embargo, el hecho de que vivir en el campus creo que facilitó el proceso de adaptación. Esto porque tenés todas las herramientas para estudiar a tu gusto: biblioteca y aulas abiertas las 24 horas, profesores que te reciben en su lugar de trabajo en cualquier momento para consultas, compañeros dispuestos a discutir un problema de la guía cuando sea necesario, entre otras cosas.

-LG: La experiencia de vivir en el CAB es una de las cosas más lindas que me llevo de haber estudiado en el IB y seguramente de las que más voy a extrañar. Convivir las 24 horas con gente que está en la misma que uno y que está dispuesta a ayudarte cuando no te sale algo es impagable, sin contar todos los momentos de juntadas, comidas en grupo o guitarreadas que se arman espontáneamente. Es bastante difícil de transmitir cómo es vivir ahí los años que dure la carrera, es algo que sin dudas es mejor experimentarlo en carne propia. Con respecto a la cursada algo que me sorprendió cuando llegué es que los bloques de materias ocupaban las 4 horas de la mañana o de la tarde, siendo que en mi universidad anterior los bloques eran de 80 minutos o 2 horas y estaba todo más fragmentado. Al principio cuesta un poco acostumbrarse a la carga horaria y resulta un poco cansador, pero a los meses uno se acostumbra y ya la lleva mejor. Una particularidad que tiene la cursada del IB es que, al estar las aulas ubicadas a metros de las habitaciones, no es extraño ver gente yendo a cursar en pijama o desayunando en las aulas para aprovechar hasta el último minuto de sueño.

-Mientras estudiaban la carrera de grado, ¿tuvieron tiempo para hobbies y deportes? ¿Algún ejemplo?

-LC: Si. En mi caso, no hice deportes durante la carrera de grado, pero salía a caminar por distintos lugares de Bariloche (playas, senderos, cerros). Hay tantos lugares por conocer y tanta naturaleza, que siempre tuve un lugar nuevo por conocer.

-LG: Nunca fui muy deportista pero sí anduve bastante en bicicleta y subí varios cerros, de esa manera pude aprovechar de los paisajes de Bariloche que es, quizás, lo más lindo que tiene para ofrecer. Con respecto a otros hobbies con Lautaro, mi compañero de cuarto, todos los días tocábamos la guitarra, y seguí mirando series casi con la misma frecuencia que antes de entrar al IB.

-¿Qué fue lo que más les gustó de estudiar en el Balseiro?

-LC: Lo más lindo fue conocer personas de distintas partes del país, incluso extranjeros. Algo también a destacar es la enseñanza personalizada, en donde los profesores te tratan como un “futuro colega” y no como alumno. La pasión con la que cada profesor transmite sus conocimientos es inigualable.

-LG: Lo que más me gustó de estudiar en el IB fue la convivencia en los pabellones, la relación tan cercana con los docentes y vivir en Bariloche que es una de los lugares más lindos que tiene el país.

-¿Qué peso tuvo la beca completa para poder estudiar en el Balseiro?

-LC: Fue muy importante, te permite estudiar tranquilamente sin estar pensando en cuestiones económicas. Además, te permite independizarte de tus padres a una edad muy temprana.

-LG: La beca fue para mí lo que más peso tuvo a la hora de decidir estudiar en el IB, ya que en mi carrera anterior estaba obligado a trabajar para poder solventar los gastos de vivir en Rosario, y eso me consumía gran parte de mi día, tiempo que después no le podía destinar a la actividad académica.

Compartir la experiencia

-¿Qué se siente al volver a casa/ciudad siendo Ingeniera/o?

-LC: Es una sensación inigualable. El hecho de lograr lo que te propusiste hace años atrás y todo el sacrificio que significó, es algo que no se puede explicar con palabras. Es una mezcla de emociones: felicidad, euforia, alegría, satisfacción y orgullo.

-LG: Llevo casi un mes y medio siendo ingeniero y es algo que todavía me cuesta creer. Para mi familia es una alegría y una tranquilidad que lo haya logrado, y además un orgullo por haberlo logrado en el Balseiro. Para mí fue sacarme una mochila gigante de encima por todos los años que me llevó alcanzar el objetivo, aunque todavía tengo la sensación de que estoy de vacaciones y que en poco tiempo voy a tener que volver a cursar, y cuando me doy cuenta que no es así es como si me faltara algo. Supongo que con el tiempo esa sensación se me irá y caeré en la cuenta de que estoy en otra etapa de la vida.

-¿Los jóvenes de tu ciudad les preguntan sobre el Balseiro?

-LC: Sí. Cada vez que vuelvo a Salta trato de hacer charlas de difusión acerca del IB y la ingeniería nuclear. Siempre hay chicos interesados en el instituto y sus carreras, por lo que está bueno motivarlos, animarlos a perseguir sus sueños y a derribar esos mitos que dicen que en el IB sólo ingresan genios.

-LG: En mi pueblo particularmente no pero sí me consultan mucho por redes sociales gente de otros lugares. En promedio una o dos veces por semana respondo alguna consulta de algún chico o chica que me escribe por Facebook o Instagram.

-¿Qué les responden cuando les preguntan en qué consiste ser Ingeniera Nuclear en el caso de Laura, o Ingeniero en Telecomunicaciones, en el caso de Lucas? ¿Qué hace un profesional de cada campo, en sus propias palabras?

-LC: Yo lo digo de la siguiente manera: “un ingeniero nuclear se dedica al empleo de radiaciones provenientes de las reacciones nucleares para utilizarlas en distintas áreas. Se las usa principalmente para la generación de electricidad, en la medicina, en el área aeroespacial y la industria alimentaria”

-LG: En un principio la tarea primordial del ingeniero en telecomunicaciones es la de solucionar el problema de transmitir información de un punto a otro, pero el campo de desarrollo de la ingeniería en telecomunicaciones es tan amplio que la mejor manera de explicar qué hace un teleco egresado del IB es contando los distintos trabajos en los que están ubicados la mayoría de egresados. La carrera en sí tiene varias áreas que se desarrollan con mucha profundidad, como lo son el procesamiento de señales, las comunicaciones satelitales, las comunicaciones ópticas y por RF, las comunicaciones digitales y analógicas, las redes de datos, el diseño digital o el diseño de protocolos de comunicación. A partir de esas áreas existen egresados trabajando en desarrollo satelital, desarrollo de software y equipos de redes de telecomunicaciones, desarrollo en FPGA, data science, procesamiento de señales de radar, etc. El perfil del ingeniero en telecomunicaciones del IB es muy versátil y puede adaptarse a muchas tareas.

-Laura, ¿por qué elegiste continuar con la Maestría en Física Médica en el Balseiro? ¿Y qué planes tenés cuando termines la maestría?

-LC: Decidí elegir realizar esa maestría porque, durante la carrera, me di cuenta que el área que realmente me apasionaba era la Medicina nuclear. Poder ayudar a las personas enfermas con las distintas técnicas que ofrece ésta área y poder hacerla lo más accesible posible es a lo que me quiero dedicar el resto de mi vida. Todavía no estoy segura sobre qué hacer luego de la maestría, no se si dedicarme a la clínica o hacer algo más ingenieril, es algo que estoy evaluando en estos días.

-Lucas, empezaste a trabajar en una empresa de telecomunicaciones, ¿tenés planes de seguir formándote con algún posgrado o qué pensás hacer en los próx. años?

-LG: Por ahora estoy muy contento con la oportunidad laboral que conseguí y quiero seguir desarrollándome profesionalmente, particularmente en las áreas en las que se especifica Emtech S.A., la empresa en la que me encuentro trabajando junto a José Quinteros del Castillo quien también egresó conmigo, que son los sistemas embebidos, el diseño digital y el desarrollo de software. No tengo pensado actualmente hacer un posgrado, pero tampoco es algo a lo que le cierre la puerta completamente.

-¿Qué es lo que más les gusta de la ciencia y/o la tecnología? ¿Y de la ingeniería en especial, en el campo que eligió cada uno?

-LC: Lo que me gusta de la ciencia y tecnología es que nunca dejas de aprender algo nuevo. Además, me gusta el trabajo interdisciplinario que se genera. Con respecto a la ingeniería nuclear, lo que me entusiasma son todas las posibles aplicaciones de la energía nuclear que todavía quedan por descubrir.

-LG: Lo que me gusta de la ingeniería es la manera que tiene de responder a las preguntas del funcionamiento de prácticamente todos los fenómenos que rigen nuestras vidas, incluso a veces de áreas externas a su campo de acción, y la manera tan eficaz que tiene de resolver gran parte de los problemas de la humanidad. De la ingeniería en telecomunicaciones me gusta que es un campo que está en constante evolución, lo cual me obliga a mantenerme actualizado con las nuevas tecnologías que van saliendo.

-Desde el año pasado, estamos publicando una campaña que dice “Más que una beca…” y se completa con alguna palabra. Por ejemplo: una aventura, una amistad, una oportunidad, un sueño, un futuro. ¿Qué palabra se les ocurre que describa su experiencia en el Balseiro?

-LC: Más que una beca, una experiencia inolvidable.

-LG: Iba a decir la misma que dijo Laura. Diría que más que una beca es una travesía.

-En un esfuerzo de síntesis, ¿qué balance hacen de su formación en el Balseiro? ¿Qué valoran más de su paso por el IB o qué les dejó formarse en el IB?

-LC: Creo que lo que más destaco de nuestra formación en el IB es el aprender a trabajar bajo presión y trabajar en equipo. La cantidad de información que tenemos que asimilar por cuatrimestre es grande, sin embargo aprendemos a optimizar nuestro estudio centrándonos en lo más importante de cada materia y en acelerar nuestro aprendizaje mediante el estudio en grupo. Entre todos nos ayudamos a seguir adelante, no decaer y aprobar las materias.

-LG: En mi caso fue la mejor experiencia educativa de mi vida. Por momentos la exigencia resulta angustiante, pero en los momentos en los que se superan los objetivos uno siente que disminuye el costo y el miedo de aprender cosas nuevas. Se pasa de pensar en “¿podré hacerlo?” a pensar en “¿cómo lo voy a hacer?”. Además, el hecho de tener semestres tan cargados de información por digerir hace que el estudiante del IB se vea obligado a generar una rapidez de aprendizaje la cual siento que es una de las mejores herramientas que me llevo de esta etapa y que me va a quedar de por vida.

-¿Hay algo en especial que les quieran decir a quienes están dudando en anotarse en el examen de ingreso del Balseiro?

-LC: Que se animen, no tengan miedo de perseguir sus sueños. Con mucho esfuerzo y dedicación van a lograr lo que sea que se propongan. El IB va a dejar una huella imborrable en su vida.

-LG: Si están dudando es porque algún interés tienen. Les diría que se animen a intentarlo ya que es mucho lo que se puede ganar por vivir esta experiencia.

–¡Muchas gracias!

*Para leer la primera parte de esta entrevista, ingresar a este link.

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Área de Comunicación Institucional

Instituto Balseiro. 

Crédito foto apertura: Chiwi Giambirtone

Crédito fotos cuerpo de la nota: Gentileza L. Cruz y L. Grigolato

San Carlos de Bariloche, 08/02/2021

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