El Ingeniero Nuclear Gabriel Achtig hace un balance sobre su paso por el Instituto Balseiro como estudiante, en una nueva entrega de la serie de columnas “El Balseiro con perspectiva”.
*Por Gabriel Achtig
Haber pasado por el Instituto Balseiro tuvo gran importancia en mi vida. Además de facilitar mi desarrollo profesional, estudiar allí me permitió conocer y disfrutar la ciudad que elegí para vivir desde entonces.
Cuando estaba en los últimos años de la secundaria, la situación económica de la Argentina hizo que fuera imposible venir de viaje de egresados a Bariloche. En esos años me enteré de la existencia del Balseiro y, además del desafío de poder entrar a una universidad tan prestigiosa, inconscientemente vi una oportunidad para saldar ese asunto pendiente de conocer la ciudad.
Viniendo de estudiar Física en la Universidad de Buenos Aires, con clases de centenares de alumnos, lo que más me impresionó del Balseiro fue la disponibilidad y predisposición de los docentes y no docentes para ayudar a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial.
La beca de CNEA fue fundamental para recibirme, ya que en los primeros años en Buenos Aires estaba trabajando tiempo parcial en uno de los laboratorios de la universidad para ayudar a solventar algunos gastos de mi carrera. En retrospectiva, creo que no hubiera podido terminar mi carrera universitaria o hubiera tardado muchos años en hacerlo.
La necesidad de aprobar todas las materias inmediatamente después de las cursadas, me hizo aprender a conceptualizar y priorizar los contenidos más importantes de múltiples áreas de conocimiento. Pude implementar esa estrategia rápidamente en mi carrera profesional.
El perfil multidisciplinario de la carrera me dio la posibilidad de elegir una tesis de grado en la que pude mejorar mis capacidades de modelado y desarrollo de software:el trabajo se enfocó en el desarrollo de un simulador de gestión de empresas de proyectos tecnológicos. A medida que fui ganando experiencia en áreas más técnicas entendí mejor esos conceptos de gestión de proyectos y ahora puedo aplicarlos en mi trabajo diario.
Mi paso por el Balseiro me permitió compartir hermosos momentos con personas muy talentosas. Ahí pude aprender una nueva forma de trabajar y sobre todo entender que los mejores resultados se dan cuando se trabaja solidariamente en equipo.
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*Gabriel Achtig, Ingeniero Nuclear egresado del Instituto Balseiro en 2000. Se especializó en software, ingeniería en sistemas satelitales, también en gestión y jefatura de proyectos. Trabajó en múltiples proyectos en la empresa INVAP (como en los proyectos ARSAT-1, SAOCOM y SABIA-Mar). Actualmente trabaja como jefe de proyecto de un satélite geoestacionario en ReOrbit y vive en Bariloche.
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Por Gabriel Achtig
Área de Comunicación Institucional y Prensa / Instituto Balseiro (CNEA-UNCUYO)
Crédito foto: Gentileza G. Achtig
Instituto Balseiro, San Carlos de Bariloche, 06/11/2024
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